La joven escritora Helene Zubillaga, añade a su palmarés un nuevo premio de carácter internacional.
En el marco incomparable del Convento del Carmen (Trigueros, Huelva), y presidido por el Alcalde de Trigueros Cristóbal Romero, José López Castilleja, Director del IES Dolmen de Soto, Luis Domingo, organizador y diferentes personalidades, se ha celebrado la entrega de Premios del Certamen en su XIX edición.
Organizado por el IES Dolmen de Soto y patrocinado por el Ayuntamiento de Trigueros, el certamen estaba dirigido a toda la comunidad escolar internacional de habla castellana, donde tienen cabida profesorado, alumnado y cualquier persona que desarrolle su trabajo en el campo de la educación.
El Alcalde de Trigueros D. Cristobal Romero, nos comentaba que era un orgullo participar en este tipo de actos que fomentan la cultura y la escritura en la comunidad educativa Internacional.
Convento del Carmen (Trigueros-Huelva)
Para la joven escritora Helene Zubillaga, estudiante del Colegio Valdeluz de Madrid, ha sido su primer premio internacional que se suma a los cuatro” Antonio Robles” (Madrid). Dos “Jóvenes Corsarios”(Cantabria) y un “Cuéntame un Cuento” (Madrid). También ha publicado “El 30 de Febrero”, libro benéfico para la Fundación Síndrome de West, de la que es habitual colaboradora. Actualmente está terminando su primera novela larga que se publicará en breve.
La autora recibe el premio del Director General Fundación Atlantic Copper.
El nombre del certamen es en honor a Fernando Belmonte, oriundo de Trigueros y que desarrolló una excelente carrera diplomática y literaria.
Su vocación Krausista Belmonte profundizaría en esa línea de pensamiento por el contacto e influencia de Francisco Giner de los Ríos y Gumersindo de Azcárate que, junto al iniciador Julián Sanz del Río (insigne catedrático de Historia de la Filosofía y de Filosofía del Derecho), ya eran los pilares en España del estudio y difusión del pensamiento de Krause.
Fernando Belmonte
A los veintisiete años Fernando Belmonte ocupó su escaño en la Cámara de Diputados de Madrid en «representación y defensa de los intereses generales de Huelva y su Provincia».
Como buen liberal dejó clara su actitud ante sus electores desde el primer momento. Sin embargo la carrera política no le sedujo y estuvo en ella sólo seis años. Adquiere mayor relevancia su dedicación a la docencia universitaria, donde sus convicciones filosófico-jurídicas se ponen de relieve. Influye en él notablemente la teoría krausista, racionalismo armónico de Karl Christian Friedrich Krause, imbuida del pensamiento hegeliano y las enseñanzas de su maestro Federico de Castro.
En 1.868, es contratado como catedrático suplente y en 1.970 como titular para la asignatura de Legislación Comparada y posteriormente sería responsable de diversas materias en los cursos de Doctorado que se imparten en la Universidad de Sevilla, de la que entonces era Rector don Antonio Machado.
En esos años comienza Belmonte a tener protagonismo activo en los ambientes y círculos culturales sevillanos.
La personalidad de Fernando Belmonte se engrandece, se ennoblece, en su labor literaria y de investigación, aunque sus escritos publicados no sean abundantes, y, sus manuscritos e inéditos se hayan extraviado o desaparecido, en su gran mayoría.
Entre sus obras se encuentran «Colección Belmonte de Cantes Populares y Flamencos», que contiene más de dos mil composiciones y supone la pervivencia de los cantes a cuya trascripción «se han añadido índices temáticos, confeccionados a un tiempo gramatical y semánticamente, de topónimos e, igualmente, otra más formados con el inventario de los gitanismos y voces de germanía existentes en los cantes». Una obra realmente excepcional. También es muy representativa “Carta en que se describen unas cacerías memorables en la villa de Trigueros y se copian varias cédulas de los Reyes Católicos sobre los cazadores del Lomo del Grullo”. Este libro recoge dos deliciosas aventuras cinegéticas, que Belmonte oyó y anotó de sus amigos cazadores, y algunas de las peculiaridades de las aficiones venatorias del Rey Católico en las inmediaciones de Doñana.
El acto fue amenizado por el pianista onubense Carlos Sánchez de la Campa.
API Agencia Prensa Internacional
