Bueeenas readers! Espero que hayáis pasado un verano estupendo, sé que la vuelta a la rutina no es lo más apetecible, pero lo bueno del final de las vacaciones es… HABLAR DEL SALSEO DE LAS VACACIONES
Este verano no ha sido tan verano para Netflix, ya que la plataforma sacó hace poco Insatiable, protagonizada por Debby Ryan, y dos películas (ambas protagonizadas por Noah Centineo/crush de medio mundo actualmente): To all the guys I loved before y Sierra Burgess is a Loser. Esta última es de la que me gustaría hablaros hoy, ya que la vi recientemente y creo que a pesar de que las intenciones de Netflix eran buenas, han metido un pelín la pata.
Básicamente la historia trata de una chica cero normativa físicamente, la cual tiene gran talento para la música y que “en principio” no está preocupada por su físico. Pongo en principio con comillas porque… NO SE LO CREE NI ELLA.
Resulta que unas chicas de su clase (copia barata de Mean Girls, he de decir) concretamente una llamada Verónica no para de meterse con ella por su apariencia y blablablá (ejem, cliché). Esta chica además tiene un admirador llamado Jamey (aka Noah Centineo) el cual está completamente colado por ella y al que rechaza por considerarlo “raro”. Verónica no solo es una borde sino que tiene la mala leche de darle el teléfono de Sierra como si fuera ella, y esta empieza a hablar con Jamey haciéndose pasar por esta última. Ambas llegan al acuerdo de continuar con la farsa a cambio de que Sierra le diera clases a Verónica para impresionar al crush de esta última.
Hasta aquí la película puede parecer muy salseante y llena de DRRRAAAAMA, y de hecho así es, pero no puedo evitar destacar una serie de cosas que son, con perdón a Netflix, LAMENTABLES.
Para empezar, la película intenta que el espectador empatice con la protagonista al no ser la típica chica guapa y demás cosas que hemos visto cien veces. Eso no sería un problema de no ser porque Sierra es estúpida. Sí, lo siento, tenía que decirlo. El hecho de que engañara a su crush haciéndose pasar por otra ES HORRIBLE, POR FAVOR NETFLIX, aparte de ABSURDO. Quiero decir, ¿de verdad esperabas que fuera a salir bien? ¡El tipo se estaba enamorando de otra! Y en caso de que decidiera contarle la verdad, era obvio que este chico la iba a crucificar (totalmente normal, porque menudo cringe).
Ya me parece mal que sea capaz de hacer eso, pero peor aún me parece que finalmente se haga amiga de Verónica (a la que inevitablemente cogí cariño) y cuando les ve besarse (Em… se supone que están saliendo, era obvio que podía pasar, Sierra, ¿ eres tonta?) a la tía no se le ocurre otra cosa que compartir una foto comprometida de Verónica para que la vea todo el instituto. Eso es de mala persona, a mí que no me vengan con el “pobrecita, es que se meten con ella porque no es guapa”, porque no es excusa para ser una víbora.
Lo gracioso es que después de todo esto, Verónica en lugar de mandarle donde yo me sé…CONVENCE A JAMEY PARA QUE LA PERDONE. Y no sólo eso sino que… LA INVITA A IR AL BAILE CON UN GIRASOL. Cabe decir que Sierra no se disculpa nunca, sino que les envía una canción a ambos compuesta por ella confesando cómo se siente. Sierra, cariño, repito: tener complejos y baja autoestima no justifica que seas una víbora.
Detalle MUY importante: el primer beso de Sierra y Jamey DA MUCHA GRIMA. Es una escena bonita, pero sinceramente me parece bastante patético que tengas que conseguir un beso de tu crush de esa manera, aparte de que NO ES CONSENTIDO O SEA, QUE SI FUERA AL REVÉS ESTARÍA TODO EL MUNDO COMO LOCO. Por favor, dejemos de romantizar este tipo de actos. No son bonitos, son creepy.
Creo que no hace falta desvelar el final porque es bastante predecible. Netflix sin duda ha intentado hacer una película de aceptación y superación de los complejos, pero se ha quedado en un cliché con detalles más que tóxicos. No voy a mentir, la película no me disgustó, y es bastante entretenida, pero no es el mejor ejemplo para quererse a uno mismo. Y mucho menos a los demás.
Y la próxima vez, que trabajen mejor a los protagonistas. Porque Sierra Burgess, desde mi punto de vista, no es una pringada…
Es idiota.
