Mika Mellark.
Morrison tiene las chaquetas que necesitas este otoño
El otoño ya está aquí y con él la eterna duda del entretiempo: qué ponernos cuando refresca sin renunciar al estilo.
Octubre es, sin duda, el mes del entretiempo.
Las mañanas y las noches reclaman abrigo, mientras que al mediodía todavía nos sorprenden temperaturas suaves que invitan a llevar algo más ligero.
Es esa época de transición en la que las chaquetas se convierten en la prenda más valiosa del armario: fáciles de poner y quitar, capaces de adaptarse a diferentes momentos del día y con el poder de transformar cualquier look en uno mucho más especial.
Morrison, firma española que ya conquistó con sus zapatillas, vuelve a demostrar su habilidad para captar el espíritu de la calle y trasladarlo a prendas llenas de personalidad.

Esta temporada, ha presentado varias chaquetas que reúnen todo lo que pedimos en octubre: funcionalidad, diseño y ese guiño cool que convierte lo cotidiano en memorable. Hemos fichado cuatro modelos que resumen a la perfección cómo vestir con estilo en este cambio de estación.
La Quilted Chestnut Jacket es la prueba de que lo práctico puede ser tendencia. Acolchada, ligera y en un tono chocolate profundo que está entre los colores estrella del otoño, esta chaqueta tipo puffer es perfecta para quienes buscan una pieza cómoda pero con vocación de fondo de armario. Su diseño oversize aporta un aire urbano y relajado, mientras que el acabado quilted la sitúa directamente en el radar de las tendencias de la temporada.
Es la chaqueta que llevarás encima de un vestido midi con botas o con vaqueros y sudadera, y siempre funcionará.
Muy diferente pero igual de versátil es la Blue Reliable Jacket, una prenda que respira inspiración college con un toque utilitario. En azul marino, con detalles bordados y letras en la espalda, se convierte en esa pieza capaz de dar carácter a cualquier estilismo sencillo. Perfecta con unos pantalones sastre para restar seriedad o con unos joggers para elevar el look más desenfadado, esta chaqueta encarna el espíritu de Morrison: juventud, rebeldía y estilo sin esfuerzo.
Para quienes buscan aportar color al armario otoñal, la Cream Worker Jacket es la elección ideal. Inspirada en las clásicas camisas de trabajo americanas, Morrison la reinventa en un tono mantequilla suave que aporta frescura y luminosidad. Su corte structured pero ligero hace que funcione tanto en looks informales con vaqueros como en combinaciones más pensadas con falda midi y botines. Es esa chaqueta que se convierte en protagonista porque ilumina cualquier conjunto sin necesidad de artificios.
Por último, la pieza con más personalidad: la Worker Beige Jacket. En un cálido tono mostaza-beige y con el detalle del cuello en pana chocolate, esta chaqueta es un homenaje al estilo worker con un giro sofisticado.
El contraste de texturas y colores eleva su aire utilitario, convirtiéndola en mucho más que una prenda funcional.
Es el tipo de chaqueta que combina igual de bien con un total look denim que con un vestido romántico, creando siempre un efecto inesperado y cool.

